Castor
La estrategia de la administración de pagar con dinero público los proyectos energéticos inviables es inadmisible
GECEN se pregunta cual es la indeminización con dinero público programada para las empresas del fracking y la extracción petrolífera de Columbretes
Más de 1.700 millones a la basura, sin reciclaje ni reutilización posible, o la certeza de que un seísmo provoque daños materiales y humanos. Ocultismo, falta obvia de los estudios pertinentes y ahora el estudio fundamental que paraliza la decisión de la administración: abrimos la planta o no, pagamos o no las indemnizaciones con un dinero que no se tiene generando más deuda, o dejamos pasar un par de años a ver si la opinión pública está más calmada y entonces probamos a abrir.
La asociación considera el Castor un error económico de 1.700 millones de euros, un engaño social con promesas incumplidas de centenares de puestos de trabajos, un peligro manifiesto para las personas y los bienes materiales y una infraestructura con un impacto medioambiental significativo.
FRACKING Y PROSPECCIONES PETROLÍFERAS.
GECEN recuerda que el fracking provocará seísmos mayores que el Castor, como señala la comunidad científica ajena y no pagada por la empresa interesada, además de una contaminación inasumible a los acuíferos y una destrucción masiva del paisaje.
Y qué decir de Cairn Energy y la búsqueda de petróleo junto a las Columbretes. Insinúan, sino lo expresan claramente, que la administración les debe indemnizar si no pueden seguir adecuadamente con los planes previstos.
Las presiones contrarias al bien común, al interés general, del lobby energético están generando una deuda ilegítima que condiciona el futuro económico, social y medioambiental, creando una dinámica nefasta que impide la aplicación de un nuevo modelo energético respetuoso y sostenible con los límites del planeta y la ciudadanía.
Más de 1.700 millones a la basura, sin reciclaje ni reutilización posible, o la certeza de que un seísmo provoque daños materiales y humanos. Ocultismo, falta obvia de los estudios pertinentes y ahora el estudio fundamental que paraliza la decisión de la administración: abrimos la planta o no, pagamos o no las indemnizaciones con un dinero que no se tiene generando más deuda, o dejamos pasar un par de años a ver si la opinión pública está más calmada y entonces probamos a abrir.
La asociación considera el Castor un error económico de 1.700 millones de euros, un engaño social con promesas incumplidas de centenares de puestos de trabajos, un peligro manifiesto para las personas y los bienes materiales y una infraestructura con un impacto medioambiental significativo.
FRACKING Y PROSPECCIONES PETROLÍFERAS.
GECEN recuerda que el fracking provocará seísmos mayores que el Castor, como señala la comunidad científica ajena y no pagada por la empresa interesada, además de una contaminación inasumible a los acuíferos y una destrucción masiva del paisaje.
Y qué decir de Cairn Energy y la búsqueda de petróleo junto a las Columbretes. Insinúan, sino lo expresan claramente, que la administración les debe indemnizar si no pueden seguir adecuadamente con los planes previstos.
Las presiones contrarias al bien común, al interés general, del lobby energético están generando una deuda ilegítima que condiciona el futuro económico, social y medioambiental, creando una dinámica nefasta que impide la aplicación de un nuevo modelo energético respetuoso y sostenible con los límites del planeta y la ciudadanía.
