Presupuestos 2019
Torreblanca afrontará el 2019 con un presupuesto de 4.700.000 euros
![[Img #69504]](http://el7set.es/upload/images/12_2018/2602_img_8994.jpg?18)
El equipo de gobierno de Torreblanca, que forman PSPV-PSOE, Compromís y dos concejales no adscritos, sacó adelante la aprobación de los presupuestos para el año 2019 en el pleno celebrado el jueves 20 de diciembre, a pesar del voto en contra del Partido Popular.
Las cuentas municipales para el próximo año ascienden a 4.700.000 euros, definidas por la alcaldesa, Josefa Tena como “prudentes, realistas, sociales, con suficiencia financiera y voluntad inversora”, pero también los calificó como “encorsetados, continuistas”, matizando, no obstante que “no quiero decir que sean un mal presupuesto, pero es con lo que tenemos que trabajar. Tenemos que saber el pueblo en el que vivimos”.
En semejante marco semántico encontramos unos presupuestos que pretenden recaudar algo más de tres millones de euros en impuestos directos e indirectos, tasas y precios públicos. El gobierno central aportará casi otro millón de euros a las arcas municipales por medio de la participación en tributos del estado. El resto corresponde a las ayudas de la Generalitat Valenciana (Servicios Sociales 105.000 euros, SEAFI 15.000 euros, Escuela Infantil 95.000 euros, Centro Ocupacional 180.000 euros y Fondo de Cooperación 80.000 euros) y los 10.000 euros con los que la Diputación Provincial subvenciona a La Passió.
Por otra parte, el Ayuntamiento de Torreblanca invertirá en 2019 un total de 172.500 euros, que se reparten en la Adecuación de Zonas Verdes en Progreso (37.000 euros), Rampa Accesible en Plaza Ramón y Cajal (16.500 euros), Adquisición de Maquinaria Obrador (5.000 euros) y Asfaltado de Caminos Rurales (100.000 euros), además de una aportación de 14.000 euros al proyecto Skate Park, todo ello con fondos propios. A futuro, aunque no contemplado en las cuentas municipales, se prevé una subvención de 100.900 euros por parte de la Diputación de Castellón con el Plan 135.
En cuanto a los gastos, los de personal se llevan la parte del león como en cualquier ayuntamiento, 2.330.370 euros, mientras que los gastos en Bienes Corrientes y Servicios se llevan otra buena tajada del pastel, casi dos millones de euros, así que lo que viene siendo abrir el kiosco cada día le cuesta a Torreblanca anualmente 1.907.775,57 euros. Por otra parte, el próximo año el ayuntamiento tiene previsto otorgar subvenciones por importe de 253.054, 43 euros.
Aunque el ejecutivo local no tiene más que parabienes con las cuentas municipales, para el Partido Popular, el presupuesto es un hijo que solo una madre puede querer. Los populares, con su portavoz María Ferrando al frente, no le vieron la gracia a la cosa. Para el PP, los presentados el pasado jueves no son unos presupuestos nuevos “la memoria de alcaldía es calcada a otros años, llevan cuatro años con la misma memoria”, así que donde otros proponían el rescate del pueblo, el PP solo ve “que ustedes solo han apostado por ustedes”, y le recriminó que en el presupuesto no aparezcan las modificaciones en las retribuciones que prometió cuando el edil Amadeo Fabregat solicitó la reducción de su jornada laboral en el ayuntamiento y con ello su sueldo.
El PP no ve fomento del empleo, ni cree que las inversiones que se realicen puedan resultar un motor para la actividad económica.
Poco debate, poca defensa de presupuestos, poco de todo menos de tópicos. Los populares se enfrascan con los sueldos del ejecutivo local y el gobierno les echa en cara el IBI, el PP replica con que se olvidaron de publicar la reducción del tipo de gravamen aprobada por el pleno por un error, el PSOE la adjudicación del agua potable, que no supisteis gestionar obras con el dinero del golf, que vosotros os lo gastasteis todos y así ad nausea. El salón de plenos de Torreblanca es un vacío en el que el tiempo viaja en forma de bucle, para que vivamos un eterno día de la marmota.
Como detalle llamativo, salió a colación la obligación de pagar una denuncia de la Seguridad Social al Ayuntamiento de Torreblanca, al haberse perdido el recurso presentado. El actual gobierno le recordaba a la bancada popular que fueron ellos los que gobernaban cuando se llevó a cabo la inspección de la Seguridad Social y se detectaron irregularidades que fueron merecedoras de una sanción y que, tras un recurso por aquello del “qué dirán” se decidió no insistir en un proceso legal “que el abogado dice que tenemos perdido”, de modo que, invocando un ahorro en costas procesales y honorarios, se ha optado por pagar la multa.
Esta postura, llena de moderación, mesura y pragmatismo, contrasta de manera significativa con la vehemente insistencia con la que el equipo de gobierno (PSPV-PSOE, Compromís y dos ex Ciudadanos) recurrieron hasta en tres ocasiones el archivo de la denuncia presentada por ellos mismos contra el anterior alcalde, Juan Manuel Peraire.
El equipo de gobierno de Torreblanca, que forman PSPV-PSOE, Compromís y dos concejales no adscritos, sacó adelante la aprobación de los presupuestos para el año 2019 en el pleno celebrado el jueves 20 de diciembre, a pesar del voto en contra del Partido Popular.
Las cuentas municipales para el próximo año ascienden a 4.700.000 euros, definidas por la alcaldesa, Josefa Tena como “prudentes, realistas, sociales, con suficiencia financiera y voluntad inversora”, pero también los calificó como “encorsetados, continuistas”, matizando, no obstante que “no quiero decir que sean un mal presupuesto, pero es con lo que tenemos que trabajar. Tenemos que saber el pueblo en el que vivimos”.
En semejante marco semántico encontramos unos presupuestos que pretenden recaudar algo más de tres millones de euros en impuestos directos e indirectos, tasas y precios públicos. El gobierno central aportará casi otro millón de euros a las arcas municipales por medio de la participación en tributos del estado. El resto corresponde a las ayudas de la Generalitat Valenciana (Servicios Sociales 105.000 euros, SEAFI 15.000 euros, Escuela Infantil 95.000 euros, Centro Ocupacional 180.000 euros y Fondo de Cooperación 80.000 euros) y los 10.000 euros con los que la Diputación Provincial subvenciona a La Passió.
Por otra parte, el Ayuntamiento de Torreblanca invertirá en 2019 un total de 172.500 euros, que se reparten en la Adecuación de Zonas Verdes en Progreso (37.000 euros), Rampa Accesible en Plaza Ramón y Cajal (16.500 euros), Adquisición de Maquinaria Obrador (5.000 euros) y Asfaltado de Caminos Rurales (100.000 euros), además de una aportación de 14.000 euros al proyecto Skate Park, todo ello con fondos propios. A futuro, aunque no contemplado en las cuentas municipales, se prevé una subvención de 100.900 euros por parte de la Diputación de Castellón con el Plan 135.
En cuanto a los gastos, los de personal se llevan la parte del león como en cualquier ayuntamiento, 2.330.370 euros, mientras que los gastos en Bienes Corrientes y Servicios se llevan otra buena tajada del pastel, casi dos millones de euros, así que lo que viene siendo abrir el kiosco cada día le cuesta a Torreblanca anualmente 1.907.775,57 euros. Por otra parte, el próximo año el ayuntamiento tiene previsto otorgar subvenciones por importe de 253.054, 43 euros.
Aunque el ejecutivo local no tiene más que parabienes con las cuentas municipales, para el Partido Popular, el presupuesto es un hijo que solo una madre puede querer. Los populares, con su portavoz María Ferrando al frente, no le vieron la gracia a la cosa. Para el PP, los presentados el pasado jueves no son unos presupuestos nuevos “la memoria de alcaldía es calcada a otros años, llevan cuatro años con la misma memoria”, así que donde otros proponían el rescate del pueblo, el PP solo ve “que ustedes solo han apostado por ustedes”, y le recriminó que en el presupuesto no aparezcan las modificaciones en las retribuciones que prometió cuando el edil Amadeo Fabregat solicitó la reducción de su jornada laboral en el ayuntamiento y con ello su sueldo.
El PP no ve fomento del empleo, ni cree que las inversiones que se realicen puedan resultar un motor para la actividad económica.
Poco debate, poca defensa de presupuestos, poco de todo menos de tópicos. Los populares se enfrascan con los sueldos del ejecutivo local y el gobierno les echa en cara el IBI, el PP replica con que se olvidaron de publicar la reducción del tipo de gravamen aprobada por el pleno por un error, el PSOE la adjudicación del agua potable, que no supisteis gestionar obras con el dinero del golf, que vosotros os lo gastasteis todos y así ad nausea. El salón de plenos de Torreblanca es un vacío en el que el tiempo viaja en forma de bucle, para que vivamos un eterno día de la marmota.
Como detalle llamativo, salió a colación la obligación de pagar una denuncia de la Seguridad Social al Ayuntamiento de Torreblanca, al haberse perdido el recurso presentado. El actual gobierno le recordaba a la bancada popular que fueron ellos los que gobernaban cuando se llevó a cabo la inspección de la Seguridad Social y se detectaron irregularidades que fueron merecedoras de una sanción y que, tras un recurso por aquello del “qué dirán” se decidió no insistir en un proceso legal “que el abogado dice que tenemos perdido”, de modo que, invocando un ahorro en costas procesales y honorarios, se ha optado por pagar la multa.
Esta postura, llena de moderación, mesura y pragmatismo, contrasta de manera significativa con la vehemente insistencia con la que el equipo de gobierno (PSPV-PSOE, Compromís y dos ex Ciudadanos) recurrieron hasta en tres ocasiones el archivo de la denuncia presentada por ellos mismos contra el anterior alcalde, Juan Manuel Peraire.
