Consejos para preparar el jardín con una desbrozadora y herramientas de mano

A medida que se aproxima la primavera debemos comenzar a planificar los trabajos que realizaremos para que nuestro jardín o parcela luzca sus mejores galas. En los cuidados del jardín tienen una gran importancia aspectos como la secuenciación de los trabajos, para realizarlos en el orden y en el tiempo correctos, de modo que sean lo más efectivos posible. De igual importancia es el uso de las herramientas adecuadas a cada trabajo.

Previamente ya deberemos haber llevado a cabo la poda de los árboles que tengamos en el jardín, principalmente árboles, setos y arbustos, para dirigir su crecimiento, eliminar las ramas muertas y favorecer nuevos brotes en la primavera. Tendremos que contar con las herramientas necesarias, básicamente tijeras de mano, serrucho y tijeras de dos manos, cuidando siempre que estén limpias y afiladas, de manera que prevengamos enfermedades y dejemos un corte limpio que cicatrice fácilmente.

Uno de los primeros trabajos a acometer será la eliminación de las malas hierbas. Para ello disponemos de una herramienta muy útil, la desbrozadora mecánica, que nos permitirá terminar el trabajo en un breve espacio te tiempo. Si no contamos con una desbrozadora podemos encontrar una adaptada a nuestras necesidades y al mejor precio accediendo a esta página web.

Con la desbrozadora podremos eliminar las malas hierbas o recortar el césped en las áreas en las que no tenemos acceso con la máquina cortacésped. Se trata de una maquinaria que requiere de precaución y algunas medidas de seguridad para su uso, pero que rinde lo suficiente como para que el esfuerzo valga la pena. Esta maquinaria ha desarrollado en los últimos años una gran variedad de accesorios que nos permitirán realizar diferentes tareas de forma rápida y sencilla.

Una vez sin malas hierbas pasaremos a remover la tierra en los parterres donde realizaremos las plantaciones de temporada en primavera. Es importante cavar la tierra y añadir algún sustrato para enriquecerla, aportando nutrientes y humedad, de modo que las raíces puedan crecer sin problema. De nuevo echaremos mano de la planificación de nuestras tareas, de modo que prepararemos el suelo de acuerdo a las variedades que queramos sembrar en primavera. No está de más revisar los sistemas de riego, que tendrán más uso cuando comience el calor, comprobando que todo funciona, limpiando filtros y boquillas de los aspersores, además de añadir tramos nuevos en los puntos en los que realizaremos nuevas siembras o en los que comprobemos que no alcanza el sistema actual.

Para el césped, sobre todo si se trata de variedades de césped grama (muy resistente en zonas secas), es importante realizar antes de que comience a crecer una escarificación siempre que sea necesario por la acumulación de materia muerta, lo que impide la correcta aireación de la planta y crea acumulaciones de hojas secas que dan un aspecto descuidado al jardín. Con la escarificación el césped tendrá un aspecto más denso y tupido, el oxígeno y el agua tendrán menos dificultad para llegar hasta las raíces, eliminamos malas hierbas y favorecemos el crecimiento profundo de las raices del césped.