Social Commerce, una de las tendencias de consumo más importantes del 2020
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Desde hace varios años que no paramos de escuchar acerca de las redes sociales, y como millones de Millennials alrededor del mundo están haciendo cantidades obscenas de dinero por “postear selfies” y videos poco interesantes. Este fenómeno no es azaroso, sino que responde a la importancia que han ganado estos canales de comunicación en la última década.
Pero el negocio en redes sociales no nace simplemente del patrocinio de marcas o de los intercambios empresariales, sino también del uso de estas plataformas como una herramienta ideal para concretar ventas. Es así como surge el Social Commerce, una tendencia que promete cambiar la forma de comprar en este 2020.
¿Qué es el Social Commerce?
Puede que hayas escuchado hasta el hartazgo el concepto de E-commerce, sin embargo, el de Social Commerce se te escapa. No serías el único ya que, a pesar de tratarse de un concepto relativamente antiguo, no fue sino hasta hace pocos años que comenzó a calar de lleno en el vocablo popular de los consumidores españoles.
El Social Commerce no es más que el uso de las redes sociales como un canal de ventas bien desarrollado, utilizándolas no solo para dar a conocer productos, sino también para crear una imagen de marca sólida y para convertir los perfiles sociales en espacios para concretar el pago de bienes y servicios.
Así, actualmente es posible que una empresa venda por Instagram sin siquiera tener que preocuparse de tener una tienda física. A través de esta red social, y desarrollando estrategias capaces de atraer, retener y capitalizar seguidores (concursos, contenido de marca, catálogos), cualquier persona con pasión por los negocios puede crear un emprendimiento verdaderamente rentable.
Social Commerce en España
Pero no creas que esto es algo nuevo en nuestro país, claro que no, ya que el Social Commerce comenzó a generar revuelo en España a mediados del 2013, cuando decenas de empresas comenzaron a trabajar con proveedores del sector para digitalizar sus marcas y comenzar a vender a través de redes sociales como Facebook y Twitter.
Casi 7 años después, aunque las redes sociales no han dejado de ser un lugar de interacción para los españoles, la realidad es que se han transformado en canales de comunicación para que las marcas y empresas del país puedan ofrecer sus productos y posicionarse en diferentes mercados, con reportes afirmando que más del 80% de estas ya cuenta con presencia digital.
Esto plantea a su vez un ambiente muy competitivo, que requerirá de profesionales en materia de digitalización de marca.
No basta con que una empresa simplemente cree un perfil de negocios en Instagram, sino de que mejore su cuenta de Instagram para poder conseguir seguidores que realmente quieren invertir en la marca, ya sea mediante el uso adecuado de los hashtags, filtros, contenido de calidad, menciones, localización, entre muchas otras herramienta que provee la red social.
El 2020 de las compras en RRSS
Si bien muchas redes sociales se han posicionado como plataformas de ventas, las realidad es que son pocas las que realmente han comenzado a utilizar herramientas que permitan concretar el consumo sin tener que visitar al menos un par de sitios adicionales.
Se espera que las RRSS más utilizadas por las empresas comiencen a implementar canales de pago directo que permitan una experiencia de consumo sin interrupciones.
Como puedes verlo, ignorar el poder de las redes sociales puede ser uno de los grandes errores que está cometiendo buena parte de las empresas, quienes lo ven más como una obligación de los nuevos tiempos que como una verdadera herramienta de crecimiento profesional.
Desde hace varios años que no paramos de escuchar acerca de las redes sociales, y como millones de Millennials alrededor del mundo están haciendo cantidades obscenas de dinero por “postear selfies” y videos poco interesantes. Este fenómeno no es azaroso, sino que responde a la importancia que han ganado estos canales de comunicación en la última década.
Pero el negocio en redes sociales no nace simplemente del patrocinio de marcas o de los intercambios empresariales, sino también del uso de estas plataformas como una herramienta ideal para concretar ventas. Es así como surge el Social Commerce, una tendencia que promete cambiar la forma de comprar en este 2020.
¿Qué es el Social Commerce?
Puede que hayas escuchado hasta el hartazgo el concepto de E-commerce, sin embargo, el de Social Commerce se te escapa. No serías el único ya que, a pesar de tratarse de un concepto relativamente antiguo, no fue sino hasta hace pocos años que comenzó a calar de lleno en el vocablo popular de los consumidores españoles.
El Social Commerce no es más que el uso de las redes sociales como un canal de ventas bien desarrollado, utilizándolas no solo para dar a conocer productos, sino también para crear una imagen de marca sólida y para convertir los perfiles sociales en espacios para concretar el pago de bienes y servicios.
Así, actualmente es posible que una empresa venda por Instagram sin siquiera tener que preocuparse de tener una tienda física. A través de esta red social, y desarrollando estrategias capaces de atraer, retener y capitalizar seguidores (concursos, contenido de marca, catálogos), cualquier persona con pasión por los negocios puede crear un emprendimiento verdaderamente rentable.
Social Commerce en España
Pero no creas que esto es algo nuevo en nuestro país, claro que no, ya que el Social Commerce comenzó a generar revuelo en España a mediados del 2013, cuando decenas de empresas comenzaron a trabajar con proveedores del sector para digitalizar sus marcas y comenzar a vender a través de redes sociales como Facebook y Twitter.
Casi 7 años después, aunque las redes sociales no han dejado de ser un lugar de interacción para los españoles, la realidad es que se han transformado en canales de comunicación para que las marcas y empresas del país puedan ofrecer sus productos y posicionarse en diferentes mercados, con reportes afirmando que más del 80% de estas ya cuenta con presencia digital.
Esto plantea a su vez un ambiente muy competitivo, que requerirá de profesionales en materia de digitalización de marca.
No basta con que una empresa simplemente cree un perfil de negocios en Instagram, sino de que mejore su cuenta de Instagram para poder conseguir seguidores que realmente quieren invertir en la marca, ya sea mediante el uso adecuado de los hashtags, filtros, contenido de calidad, menciones, localización, entre muchas otras herramienta que provee la red social.
El 2020 de las compras en RRSS
Si bien muchas redes sociales se han posicionado como plataformas de ventas, las realidad es que son pocas las que realmente han comenzado a utilizar herramientas que permitan concretar el consumo sin tener que visitar al menos un par de sitios adicionales.
Se espera que las RRSS más utilizadas por las empresas comiencen a implementar canales de pago directo que permitan una experiencia de consumo sin interrupciones.
Como puedes verlo, ignorar el poder de las redes sociales puede ser uno de los grandes errores que está cometiendo buena parte de las empresas, quienes lo ven más como una obligación de los nuevos tiempos que como una verdadera herramienta de crecimiento profesional.
