4 rincones escondidos de Canarias para huir de las aglomeraciones
![[Img #82812]](http://el7set.es/upload/images/08_2021/9777_dunes-1129168_640.jpg)
Las Islas Canarias son un destino turístico sobradamente reconocido y apreciado a nivel internacional por sus múltiples encantos y no vamos a descubrir a estas alturas unos atractivos que atraen anualmente a millones de visitantes hasta sus playas. Al turismo de sol y playa se le une la atractiva opción de visitar sus parques nacionales, como los de Timanfaya y Teide, donde conocer la riqueza natural de este archipiélago, donde África se asoma a Europa.
Sin embargo, existen numerosos rincones no tan conocidos de las islas, en los que el visitante puede disfrutar de una experiencia singular que a buen seguro le sorprenderá gratamente por la variedad de ambientes que podemos encontrar si buscamos un poco. Hay muchos lugares desconocidos por el gran público en las Islas Canarias y en este enlace podremos conocerlos al detalle, aunque en este artículo intentaremos destacar algunos de los más significativos a modo de ejemplo. Sin embargo, el verdadero reto es encontrar muchos más para disfrutar a fondo de la experiencia del descubrimiento de esos rincones particulares, que se convertirán a buen seguro en nuestro rincón favorito de las islas.
El primero de estos lugares únicos está escondido a plena vista, en la isla de Gran Canaria. Se trata de las Dunas de Maspalomas, declaradas Reserva Natural Especial por su valor ecológico y singularidad, que representan un pedazo de desierto africano junto al mar, sobreviviendo a la presión del turismo masivo gracias a la protección de este paisaje que nos brindará una experiencia única apreciando paisajes de una espectacular belleza.
En las islas de Gran Canaria, Tenerife y el Hierro encontraremos los conocidos como pueblos de medianías, localidades históricas fundadas en el interior de las islas, hasta los 800 metros de altura sobre el nivel del mar, donde los pobladores se refugiaban del peligro de las costas por el ataque de los piratas y otras amenazas. Entre estos municipios, que conservan el encanto de la arquitectura tradicional, encontramos Teror, Telde, Agüimes, o Tafira en la isla de Gran Canaria, la capital de El Hierro, Valverde, o Granadilla de Abona, Guía de Isora y Los Realejos en la isla de Tenerife. Pueblos con encanto que atraparán nuestro interés y crearán imágenes inolvidables de nuestras vacaciones.
Menos conocido que sus compañeros de Teide y Timanfaya, el Parque Nacional de Garajonay, en La Gomera, es también merecedor de estar en una lista de rincones poco conocidos de las islas que no debemos perdernos en nuestra visita. Este espacio natural alberga la selva húmeda de laurisilva, una herencia del periodo Terciaria que ha preservado hasta nuestros días un vestigio de los bosques que poblaron la cuenca mediterránea y de los que han quedado tan solo unos pequeños retazos en Sudamérica y en algunos archipiélagos. Conocidos como Monteverde por los habitantes de las islas, este tipo de bosque, que alberga especies arbóreas cuyas hojas están recubiertas de una especie de cera, viven entre las brumas que ascienden hasta estos hábitats desde el océano y representan un fósil viviente de la flora que existió en la zona.
El Museo y Parque Arqueológico Cueva Pintada se considera un excepcional testimonio de la cultura que habitaba Gran Canaria antes de la llegada de los europeos. Este conjunto brinda la oportunidad al visitante de conocer las casas y cuevas que habitaron los indígenas, gracias a los trabajos de excavación realizados durante los últimos 24 años.
Las pinturas de la Cueva Pintada representan en si mismas un símbolo de la cultura canaria, habiendo sido declaradas en el año 1972 como Monumento Histórico Artístico. Se trata de una cueva artificial excavada en la toba volcánica y cuyas paredes aparecen decoradas con frisos de motivos geométricos.
Las Islas Canarias son un destino turístico sobradamente reconocido y apreciado a nivel internacional por sus múltiples encantos y no vamos a descubrir a estas alturas unos atractivos que atraen anualmente a millones de visitantes hasta sus playas. Al turismo de sol y playa se le une la atractiva opción de visitar sus parques nacionales, como los de Timanfaya y Teide, donde conocer la riqueza natural de este archipiélago, donde África se asoma a Europa.
Sin embargo, existen numerosos rincones no tan conocidos de las islas, en los que el visitante puede disfrutar de una experiencia singular que a buen seguro le sorprenderá gratamente por la variedad de ambientes que podemos encontrar si buscamos un poco. Hay muchos lugares desconocidos por el gran público en las Islas Canarias y en este enlace podremos conocerlos al detalle, aunque en este artículo intentaremos destacar algunos de los más significativos a modo de ejemplo. Sin embargo, el verdadero reto es encontrar muchos más para disfrutar a fondo de la experiencia del descubrimiento de esos rincones particulares, que se convertirán a buen seguro en nuestro rincón favorito de las islas.
El primero de estos lugares únicos está escondido a plena vista, en la isla de Gran Canaria. Se trata de las Dunas de Maspalomas, declaradas Reserva Natural Especial por su valor ecológico y singularidad, que representan un pedazo de desierto africano junto al mar, sobreviviendo a la presión del turismo masivo gracias a la protección de este paisaje que nos brindará una experiencia única apreciando paisajes de una espectacular belleza.
En las islas de Gran Canaria, Tenerife y el Hierro encontraremos los conocidos como pueblos de medianías, localidades históricas fundadas en el interior de las islas, hasta los 800 metros de altura sobre el nivel del mar, donde los pobladores se refugiaban del peligro de las costas por el ataque de los piratas y otras amenazas. Entre estos municipios, que conservan el encanto de la arquitectura tradicional, encontramos Teror, Telde, Agüimes, o Tafira en la isla de Gran Canaria, la capital de El Hierro, Valverde, o Granadilla de Abona, Guía de Isora y Los Realejos en la isla de Tenerife. Pueblos con encanto que atraparán nuestro interés y crearán imágenes inolvidables de nuestras vacaciones.
Menos conocido que sus compañeros de Teide y Timanfaya, el Parque Nacional de Garajonay, en La Gomera, es también merecedor de estar en una lista de rincones poco conocidos de las islas que no debemos perdernos en nuestra visita. Este espacio natural alberga la selva húmeda de laurisilva, una herencia del periodo Terciaria que ha preservado hasta nuestros días un vestigio de los bosques que poblaron la cuenca mediterránea y de los que han quedado tan solo unos pequeños retazos en Sudamérica y en algunos archipiélagos. Conocidos como Monteverde por los habitantes de las islas, este tipo de bosque, que alberga especies arbóreas cuyas hojas están recubiertas de una especie de cera, viven entre las brumas que ascienden hasta estos hábitats desde el océano y representan un fósil viviente de la flora que existió en la zona.
El Museo y Parque Arqueológico Cueva Pintada se considera un excepcional testimonio de la cultura que habitaba Gran Canaria antes de la llegada de los europeos. Este conjunto brinda la oportunidad al visitante de conocer las casas y cuevas que habitaron los indígenas, gracias a los trabajos de excavación realizados durante los últimos 24 años.
Las pinturas de la Cueva Pintada representan en si mismas un símbolo de la cultura canaria, habiendo sido declaradas en el año 1972 como Monumento Histórico Artístico. Se trata de una cueva artificial excavada en la toba volcánica y cuyas paredes aparecen decoradas con frisos de motivos geométricos.
