Nuestra salud comienza sabiéndonos cuidar
No hay duda de que la salud es lo más importante de la vida. Y es que, aunque evidentemente hay otras cosas fundamentales, sin ella no podemos disfrutar de todo lo demás.
Por eso es tan vital que sepamos cuidarnos adecuadamente. Ahora, además, contamos con muchos productos que pueden ayudarnos, como los alimentos o la cosmética sostenible.
Hábitos saludables para cuidarte
Incorporar ciertos hábitos saludables a tu vida puede marcar una gran diferencia en tu salud.
Ejercicio físico
El ejercicio físico es ideal tanto para lograr una agradable sensación de bienestar como para la salud de nuestro corazón. Otros de sus muchos beneficios son que contribuye a regular el colesterol y la sensibilidad a la insulina, previene la obesidad y mejora el tono muscular.
Huye, por lo tanto, del sedentarismo. Y no es que sea necesario “matarse” a hacer ejercicio ni mucho menos. Para empezar a experimentar todo lo bueno que el ejercicio puede ofrecerte basta con caminar una hora (o incluso media) diaria o con practicar unas tres veces al día actividades aeróbicas como la natación, el ciclismo o el baile.
Mantén también una vida activa. Por ejemplo, usa las escaleras en lugar del ascensor o desplázate caminando dejando de lado el coche cuando sea posible.
Cuida tu alimentación
La alimentación influye en muchos aspectos de nuestra salud como la osteoporosis, la diabetes, la obesidad, la hipertensión arterial o los problemas cardíacos, entre otros.
Es muy recomendable incluir alimentos que incluyan esto en tu dieta habitual:
- Grasas. Eso sí, moderando su consumo.
- Vitaminas y minerales como el calcio o el hierro.
- Al menos 25 gramos de fibra. Las legumbres, las verduras, los frutos secos, las frutas y las verduras son algunos de los alimentos que la incluyen.
- La proteína que está presente en alimentos como los lácteos, las legumbres o el pescado.
- Hidratos de carbono. Encontrarás esta enorme fuente de energía en alimentos como la pasta, el arroz, los cereales o las patatas.
Por otro lado, evita excederte en alimentos como mucho azúcar o grasas saturadas. Además, la manera en la que se cocina es determinante. Las mejores alternativas para comer sano son la plancha, el vapor, el horno y la cocción.
Hábitos cosméticos saludables
Algunos hábitos cosméticos también pueden ser muy beneficiosos para tu salud:
- Usa protección solar.
- Bebe mucha agua. Esto además beneficiará a tu cuerpo en general, especialmente a los riñones y el intestino.
- Realiza masajes reductores que estimulen la circulación sanguínea, beneficiando de paso el sistema vascular.
- Utiliza cremas hidratantes. No debemos olvidar que la piel es la principal encargada de servir como barrera de agentes externos patógenos. Si utilizas alternativas naturales y ecológicas como una bruma para cara, mejor que mejor.
Otros hábitos saludables
- Deja de lado el tabaco.
- Modera el consumo de alcohol.
- Hidrátate con regularidad, ingiriendo el líquido necesario.
- Duerme lo suficiente.
- Reduce el consumo de grasa.
- Practica deporte con regularidad.
- Come lo más sano posible.
- Cuida tu higiene.
- Ejercita la mente.
- Reserva espacio para tiempo libre de calidad haciendo cosas que realmente disfrutes.
Esperamos haberte ayudado a conocer nuevas formas de cuidar tu salud. Al principio tal vez se haga algo “cuesta arriba” incorporarlas a tu rutina, pero los beneficios que irás notando seguramente harán que ya no puedas estar sin ellos.
No hay duda de que la salud es lo más importante de la vida. Y es que, aunque evidentemente hay otras cosas fundamentales, sin ella no podemos disfrutar de todo lo demás.
Por eso es tan vital que sepamos cuidarnos adecuadamente. Ahora, además, contamos con muchos productos que pueden ayudarnos, como los alimentos o la cosmética sostenible.
Hábitos saludables para cuidarte
Incorporar ciertos hábitos saludables a tu vida puede marcar una gran diferencia en tu salud.
Ejercicio físico
El ejercicio físico es ideal tanto para lograr una agradable sensación de bienestar como para la salud de nuestro corazón. Otros de sus muchos beneficios son que contribuye a regular el colesterol y la sensibilidad a la insulina, previene la obesidad y mejora el tono muscular.
Huye, por lo tanto, del sedentarismo. Y no es que sea necesario “matarse” a hacer ejercicio ni mucho menos. Para empezar a experimentar todo lo bueno que el ejercicio puede ofrecerte basta con caminar una hora (o incluso media) diaria o con practicar unas tres veces al día actividades aeróbicas como la natación, el ciclismo o el baile.
Mantén también una vida activa. Por ejemplo, usa las escaleras en lugar del ascensor o desplázate caminando dejando de lado el coche cuando sea posible.
Cuida tu alimentación
La alimentación influye en muchos aspectos de nuestra salud como la osteoporosis, la diabetes, la obesidad, la hipertensión arterial o los problemas cardíacos, entre otros.
Es muy recomendable incluir alimentos que incluyan esto en tu dieta habitual:
- Grasas. Eso sí, moderando su consumo.
- Vitaminas y minerales como el calcio o el hierro.
- Al menos 25 gramos de fibra. Las legumbres, las verduras, los frutos secos, las frutas y las verduras son algunos de los alimentos que la incluyen.
- La proteína que está presente en alimentos como los lácteos, las legumbres o el pescado.
- Hidratos de carbono. Encontrarás esta enorme fuente de energía en alimentos como la pasta, el arroz, los cereales o las patatas.
Por otro lado, evita excederte en alimentos como mucho azúcar o grasas saturadas. Además, la manera en la que se cocina es determinante. Las mejores alternativas para comer sano son la plancha, el vapor, el horno y la cocción.
Hábitos cosméticos saludables
Algunos hábitos cosméticos también pueden ser muy beneficiosos para tu salud:
- Usa protección solar.
- Bebe mucha agua. Esto además beneficiará a tu cuerpo en general, especialmente a los riñones y el intestino.
- Realiza masajes reductores que estimulen la circulación sanguínea, beneficiando de paso el sistema vascular.
- Utiliza cremas hidratantes. No debemos olvidar que la piel es la principal encargada de servir como barrera de agentes externos patógenos. Si utilizas alternativas naturales y ecológicas como una bruma para cara, mejor que mejor.
Otros hábitos saludables
- Deja de lado el tabaco.
- Modera el consumo de alcohol.
- Hidrátate con regularidad, ingiriendo el líquido necesario.
- Duerme lo suficiente.
- Reduce el consumo de grasa.
- Practica deporte con regularidad.
- Come lo más sano posible.
- Cuida tu higiene.
- Ejercita la mente.
- Reserva espacio para tiempo libre de calidad haciendo cosas que realmente disfrutes.
Esperamos haberte ayudado a conocer nuevas formas de cuidar tu salud. Al principio tal vez se haga algo “cuesta arriba” incorporarlas a tu rutina, pero los beneficios que irás notando seguramente harán que ya no puedas estar sin ellos.