El alcalde de Sant Joan de Moró condena enérgicamente las pintadas vandálicas en la Ermita de Sant Miquel de Vilafamés

El alcalde de Sant Joan de Moró, Vicente Pallarés, ha expresado, en nombre de todo el equipo de gobierno, una condena “enérgica y rotunda” contra las pintadas aparecidas en la ermita de Sant Miquel de Vilafamés, las cuales han deteriorado el patrimonio del pueblo vecino. Pallarés lamentó que “haya quienes quieran abrir heridas donde no las hay” y subrayó que “quien o quienes hayan hecho esta acción ilícita para nada nos representa a los moroneros. El Ayuntamiento de Moró se desmarca absolutamente de estos posicionamientos”.

El acto vandálico, que incluye mensajes como "Sant Miquel de Moró que de Vilafamés no será" y "Putos cul rojos", ha sido condenado por Pallarés, quien resaltó que el incidente intenta enfrentar a dos pueblos vecinos que mantienen una excelente relación. “No vamos a tolerar este tipo de situaciones. Animamos a las autoridades competentes a que investiguen los hechos y traten de localizar al autor o autores”, afirmó el alcalde. Además, informó que se ha puesto en contacto con la alcaldesa de Vilafamés, Ana Andrada, y con la portavoz de la oposición, la diputada Marisa Torlá, para expresar su condena a estos actos vandálicos. También ha trasladado el mismo sentir y condena a la Associació d’Amics de Sant Miquel.

Pallarés anunció que el Ayuntamiento de Sant Joan de Moró se ha ofrecido a costear los trabajos de limpieza de la pared dañada, “como muestra de buena vecindad y total colaboración entre los dos pueblos, que aunque hace 33 años decidieron seguir caminos en solitario y Moró decidiera constituirse como municipio con identidad y organización institucional propia, sienten y viven en armonía y en perfecta comunidad”.

El alcalde también recordó que en la fiesta de Sant Miquel, ambos pueblos participan unidos en la celebración, con los quintos de ambas poblaciones repartiendo hogazas bendecidas para todos los vecinos sin problema alguno.

“Desde el Ayuntamiento, y en nombre de los vecinos de Moró, solo me queda pedir perdón al Ayuntamiento de Vilafamés, a la asociación Amics de Sant Miquel, y al conjunto de sus vecinos. Nos ponemos a su disposición para lo que puedan necesitar de nosotros”, concluyó Vicente Pallarés.