Parany
El Ministerio da la razón a las ONG medioambientales cuando exigimos que cualquier modificación legislativa que pretenda legalizar el parany cuente con el visto bueno de Europa
Las sentencias judiciales y la legislación estatal y europea no permiten los métodos masivos y no selectivos de caza como el parany
No existe el parany en Francia más que en el imaginario de APAVAL y la Conselleria, por lo que insistir en el agravio comparativo y utilizar el método francés de caza como argumento para pretender legalizar el parany está fuera de lugar.
GECEN denuncia que lo que pretenden APAVAL-Conselleria no es cazar como lo hacen los franceses, de forma mucho más selectiva por las características del método, en pequeñas cantidades, bajo estricto control, de día, durante muy poco tiempo, con escaso número de instrumentos de caza, siempre se capturan los zorzales en vivo para utilizarlos como reclamo y nunca para usos gastronómicos, etc. Lo que pretenden APAVAL-Conselleria es obtener una aprobación como sea para después ignorar lo escrito y cazar como siempre.
Sin embargo, no van a engañar a nadie pues ya saben en Europa en qué consiste el parany, como así demuestra la sentencia muy clarificadora del Tribunal de la Unión Europea y las respuestas de la Comisión Europea a los escritos de las ONG medioambientales. Además, atendiendo a la reciente Directiva Aves (DIRECTIVA 2009/147/CE) es imposible legalizar el parany y si lo que se pretende es cazar pequeñas cantidades de zorzales vivos utilizando el método francés, cuestión que nunca aceptarían los paranyeros, simplemente el parany deja de existir.
Catalunya intentó legalizar el parany pero hizo lo que desde el Ministerio se exige al Consell: remitir el borrador a Europa y condicionar su aprobación al visto bueno de la Comisión Europea. La respuesta de la Comisión no pudo ser más obvia y rechazó el borrador del Decreto que pretendía legalizar el parany por ser contraria a la legislación europea y, además, por haber sido el asunto objeto de sentencia del Tribunal de la Unión Europea que dictamina que el parany es ilegal.
Recordamos que las sentencias que se han emitido contra el parany, atendiendo a la legislación medioambiental, tienen su razón de ser y que no es otra que evitar la masacre de cientos de miles de aves, cuya caza está prohibida, cada año.
Abstraerse de esta realidad y dar apoyo político incondicional a un método ilegal de caza masivo y no selectivo por rendimiento electoral denota un desprecio absoluto hacia la protección de la biodiversidad, a los millones de ciudadanos españoles y europeos que no admiten esta masacre y a los millones de euros que nuestros socios europeos han invertido protegiendo las aves.
No existe el parany en Francia más que en el imaginario de APAVAL y la Conselleria, por lo que insistir en el agravio comparativo y utilizar el método francés de caza como argumento para pretender legalizar el parany está fuera de lugar.
GECEN denuncia que lo que pretenden APAVAL-Conselleria no es cazar como lo hacen los franceses, de forma mucho más selectiva por las características del método, en pequeñas cantidades, bajo estricto control, de día, durante muy poco tiempo, con escaso número de instrumentos de caza, siempre se capturan los zorzales en vivo para utilizarlos como reclamo y nunca para usos gastronómicos, etc. Lo que pretenden APAVAL-Conselleria es obtener una aprobación como sea para después ignorar lo escrito y cazar como siempre.
Sin embargo, no van a engañar a nadie pues ya saben en Europa en qué consiste el parany, como así demuestra la sentencia muy clarificadora del Tribunal de la Unión Europea y las respuestas de la Comisión Europea a los escritos de las ONG medioambientales. Además, atendiendo a la reciente Directiva Aves (DIRECTIVA 2009/147/CE) es imposible legalizar el parany y si lo que se pretende es cazar pequeñas cantidades de zorzales vivos utilizando el método francés, cuestión que nunca aceptarían los paranyeros, simplemente el parany deja de existir.
Catalunya intentó legalizar el parany pero hizo lo que desde el Ministerio se exige al Consell: remitir el borrador a Europa y condicionar su aprobación al visto bueno de la Comisión Europea. La respuesta de la Comisión no pudo ser más obvia y rechazó el borrador del Decreto que pretendía legalizar el parany por ser contraria a la legislación europea y, además, por haber sido el asunto objeto de sentencia del Tribunal de la Unión Europea que dictamina que el parany es ilegal.
Recordamos que las sentencias que se han emitido contra el parany, atendiendo a la legislación medioambiental, tienen su razón de ser y que no es otra que evitar la masacre de cientos de miles de aves, cuya caza está prohibida, cada año.
Abstraerse de esta realidad y dar apoyo político incondicional a un método ilegal de caza masivo y no selectivo por rendimiento electoral denota un desprecio absoluto hacia la protección de la biodiversidad, a los millones de ciudadanos españoles y europeos que no admiten esta masacre y a los millones de euros que nuestros socios europeos han invertido protegiendo las aves.
