La Llosa despide sus fiestas patronales en honor a San Felipe Neri y San Isidro Labrador tras diez días de intensa participación

La Llosa ha puesto el broche final a sus fiestas patronales en honor a San Felipe Neri y San Isidro Labrador, tras diez jornadas en las que el municipio ha combinado tradición, cultura, música, gastronomía y actividades para todos los públicos.

Las celebraciones han contado con una alta participación de vecinos, vecinas y visitantes, que han llenado de ambiente festivo las calles y plazas en los distintos actos programados.

Los festejos taurinos volvieron a ser protagonistas con encierros, vaquillas, bou embolat y toros cerriles de ganaderías de prestigio, además de la tradicional trashumancia de ganado, que despertó gran expectación entre el público.

La música y el entretenimiento estuvieron presentes cada día, gracias a charangas, discomóviles, orquestas y espectáculos familiares, entre ellos el tributo a Frozen y la representación Dragons i peluts, que reunieron a asistentes de todas las edades. En el ámbito gastronómico, no faltaron citas tan esperadas como la torrà de xulles y el tradicional reparto del tombet de bou.

Las celebraciones religiosas, en honor a los patrones San Felipe Neri y San Isidro Labrador, aportaron los momentos más solemnes con misas, procesiones acompañadas por la Banda de Música de la Asociación Cultural La Llosa, mascletà y un castillo de fuegos artificiales que puso el cierre al programa festivo.

El alcalde de La Llosa, Ximo Llopis, ha hecho un balance muy positivo de las fiestas, destacando “el esfuerzo colectivo que hay detrás de cada acto” y agradeciendo la implicación de asociaciones, peñas y vecinos en mantener vivas las tradiciones locales.